El tocado o el sombrero ¿Qué elegir para cada ocasión?
La hora del día es la que marca qué llevar en cada momento. Hay que hacer caso de la etiqueta que marca qué llevar en función de la hora del día. A medida que la hora del día crece, el adorno para la cabeza decrece. Es decir, durante el día, hasta el mediodía, los grandes sombreros de generosa ala, las pamelas y complementos de este estilo son ideales para lucir de una manera deslumbrante.
Por la tarde, empieza a mermar el tamaño del sombrero. Hay que lucir algo más discreto como por ejemplo un sombrero tipo albero o cualquier otro modelo que esté de moda y actualidad en ese momento.
Tanto durante la mañana como por la tarde es posible cambiar el sombrero por un tocado, también generoso en espectacularidad como el mejor de los sombreros. Durante el día los tocados son vistosos, ligeros y de colores vivos. Hay que evitar los brillantes, los dorados, los cristales y otros elementos que se suelen reservar para la noche. Los tocados durante el día pueden ser algo más grandes, vistosos y pueden tapar ligeramente parte de la cara. Por la noche, el tocado es más pequeño, de menor tamaño pero más "potente" en cuanto a los materiales utilizados, dorados, plateados, brillantes, etc.
Por la noche, el rey es el tocado; luce tan elegante como el vestido. Ambos deben complementarse intentando que uno no sobresalga sobre el otro. Un vestido muy llamativo requiere un tocado sencillo, discreto. Un vestido sencillo requiere un tocado más llamativo, lujoso y atrevido, podemos decir. Ambos, vestido y tocado, deben sumar un todo, importante, elegante y vistoso. La noche es para lucir dorados, pedrerías, cristales y elementos más brillantes y luminosos.
Fotografías de Daniel García de @deferides
Tocados de Claumon
El tocado debe permanecer puesto desde que sale de casa hasta que regresa. No se quita en ningún momento. La etiqueta impide que el tocado pueda ser retirado como si fuese un sombrero de caballero.
Los expertos en moda nos recomiendan realizar el tocado con una ligera caída hacia el lado derecho, debido a que las mujeres suelen dar el brazo izquierdo al hombre -que ofrece su brazo derecho a la mujer-, para evitar cualquier tipo de molestia.
A la hora de las presentaciones, cuidado con el saludo de dos mujeres que lucen tocado. Hay que tratar de no enredarse o tropezar. Puede quedar dañado el tocado de alguna de ellas. Mejor un simple beso en la mejilla izquierda o un ademán de saludo con un beso simulado.
Francisco Javier Ripoll Feliu
Experto en Protocolo y Ceremonial